lunes, 23 de julio de 2007

Tónico contra la vejez prematura

"Se nos está yendo la gente del estadio", me molesta el papanatas de turno al percatarse de mi calvicie ya no tan incipiente. Mi barbilla -observo en la pantalla del computador- está un tanto flácida. El abdomen, ídem. Patas de gallo enmarcan mis ojos. El jueves de la semana pasada me dieron el asiento en la micro. El viernes me compré calzoncillos largos para tolerar el frío valdiviano y el sábado me entretuve vitrineando guateros... Los años pasan y pesan. Debo asumirlos, pero me cuesta.

A veces me sorprendo censurando mis palabras, ¿me estaré volviendo moralista? Ya no tomo, no bailo apretado, no trasnocho, fumo poco y mi consumo de hot dogs, por exigencia de mi doctor (¿o debiera decir geriatra?) y de mi hígado, disminuyó a menos de la mitad de lo que acostumbraba en mi época universitaria... Me estoy poniendo viejo.

Me cuesta recordar nombres, situaciones, fechas. Debo anotar todo, pero a veces no lo hago porque olvido el lápiz en casa. ¡El alzheimer se apodera de mí! Se hace preciso lanzarle un ancla al reloj para detener el tiempo.

Y por qué mejor no creo un blog?, pensé hace un par de días. Así puedo registrar todo lo que me venga en gana y escribir sobre lo que me gusta -el periodismo narrativo, principalmente-, evitando que mis ideas caigan directo en la papelera de reciclaje, como me viene sucediendo desde hace un par de años. De paso, aprovecho para ponerme al día en el uso de las nuevas tecnologías de la información, y tal vez hasta me ayude a sentirme menos arcaico. Vamos, dale, me dije.

Por eso estoy aquí: para planchar mis arrugas mentales y renovarme. Por eso, y también para compartir crónicas, reportajes, perfiles, entrevistas, ensayos, opiniones, reflexiones y otros escritos -míos y prestados; de Valdivia y el "extranjero"- con quienes tropiecen con este sitio.

Una penúltima cosa antes del adiós. Acabo de decidir que mi edad, como parte de este proceso de renovación, requiere con urgencia de un lifting. Retrocederé a los 29 años y de ahora en adelante sólo sumaré meses. Ya no tengo 32: tengo 29 años y 38 meses.

Por último, ofrezco disculpas por el largo preámbulo, por las divagaciones personales que anteceden al puntapié inicial de este blog, que en el futuro pretende abordar temas públicos. Son costumbres que conservo de mi época de viejo.

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Y sí. Kurt Cobain estaba vivo cuando taquillábamos... (Demonios!... no pensaba pegarme un viejazo léxico tan temprano en este comentario). En fin mi amigo. Quería decirle que no está solo en este proceso de pasar de adulto/joven a adulto/fome. A mi no se me va la gente del estadio aún, pero -como dice el gurú del Coco Legrand- me están creciendo pelos donde nunca me habían crecido.
Ánimo... es un proceso lento que cada vez se pone peor.

Anónimo dijo...

Sobre llegar a viejo...
Ingmar Bergman decía "Envejecer es como escalar una gran montaña; mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena".
Y mi cita favorita "La madurez es aquella edad en que uno ya no se deja engañar por sí mismo" de R. W. Emerson
Y para hacer de este comentario un ejercicio interactivo (por algo es un blog y no un simple posteo, o no?) Recomiendo leer a Emerson y de paso "The Dial" un periódico en el que colaboró -ojo q estoy hablando del siglo XIX- Un poco para conocer cómo es posible hacer un periodismo menos tradicional y menos rutinario (Era un periódico trascendentalista -ahi va otra tarea-)
Explico por qué es interesante este personaje -por lo menos para mí-. Hijo de sacerdote, se ordenó pastor y estudió teología en Hardvard. Viajó a Europa, en donde conoció a la crème de la crème literaria de ese entonces -no los nombraré, averigüenlo ustedes- y al regresar, le pidieron dar una conferencia en una de esas mezclas entre comunidades y "sectas" q existen al interior de las universidades gringas que, en este momento, no recuerdo como se llaman. Bueno, el asunto es que dijo que la religión debía ser una experiencia intuitiva e independiente. Dejó la media kga y, de paso, colgó los hábitos. (Hoy eso no tiene nada de extraordinario, pero no hay que olvidar que estaba en plena época victoriana)
En fin, todo este largo bla, bla fue para contextualizar la cita "La madurez es aquella edad en que
uno ya no se deja engañar por sí mismo" y yo le agregaría "ni por lo que te han hecho creer"...

Unknown dijo...

Estaba pensando que iba a ser fome enterarme de tus últimos sucesos a través de un blog. Digo, en vez de hablar en vivo y en directo, cosa que no hacemos hace días.
Estaba en eso cuando se me ocurrió ver tus sugerencias de revista y la primera que pinché fue SOHO y, en fin, otro día seguimos hablando porque ahora estoy navegando.

Robreche dijo...

Amigo Pancho, este blog no es para hablar sobre mi vida, sino sobre periodismo y sucesos que tengan valor desde el punto de vista periodístico. Eventualmente, puede que hable sobre mí -lo que no me costaría nada-, pero sólo si lo ameritan los temas que expondré. Y siga revisando Soho no más: ¡qué revista!

Respecto de lo que plantea Consuelo acerca de la madurez, debo decir que no es fácil dejar de engañarse a uno mismo. La calvicie no siempre es sinónimo de madurez. Afortunadamente, lo segundo tiene solución.

Y, Herman, lo importante es no tener pelos en la lengua. Sé que no es tu caso. Tú sufres de alopecia lingual.

Anónimo dijo...

Eso mierda!
Don Rodrigo no sólo tiene blog, sino que pautea los comentarios. Ese sí es un signo claro de vejez ¿prematura?... Así que estimado Pancho, cuídese de hablar de lo que Rodrigo ponga en SU blog... nada más (no se le ocurra hablar de la vida del susodicho).
Ahora... si Rodrigo no quiere que hablemos de su vida ¿pa qué habla de su vida en su blog?... aunque claro, es su vida, su blog y escribe lo que su le ocurra. Mmmm... gran dilema. Es un probelam de diéresis.

Caroline Stevens dijo...

Cual madurez???? De qué me están hablando??? los conozco de cuando tenían pelo... y se hacían colitaaaaaa (con cole negro eso sí); y déjemne decirles.... están iguales!!!!!
jajajajaja. Debe ser porque yo he "madurado" con ustedes, por lo tanto me cuesta ver aquello que para el resto es tan obvio...
De todas formas, RO, me alegro por tu blog, espero que sera una vía de escape y una forma para que tus amigos que estamos lejos sepamos más de ti.

Robreche dijo...

¿Viste, Herman, que no tienes pelos en la lengua? (como si alguien tuviera alguna duda al respecto). Mi intención no era pautear los comentarios; si quieren hablar de mí, yo feliz... me encanta ser el centro de atención. Siempre y cuando no recuerden episodios que yo, por esas cosas del carrete, no recuerdo. No vale la pena hablar de esas cosas que a uno no le constan, jejeje.

Carito: ¿Te acuerdas de cuando te planchabas el pelo en vez de estudiar Historia (igual te iba mejor que a nosotros, grrr) y pedías helados con hartas cucharitas? Bueno, yo creo que tú sí has madurado... pero igual te planchai el pelo y te jurai pelolais, ¿o no, galla? Chau.

creación y resiliencia dijo...

Nada que decir, está buena la partida de tu blog. Y respecto a la (in) madurez, a veces no es malo empaparse de la juventud que irradian Nicanor Parra o don Celino y su improvisado "Koala".

Anónimo dijo...

jjaja...uta ke me reicon tu introspeccion de que te esta poniendo viejo!
naj.,...todoa vamos pa la misma uos mas rapido que otros


ya no vemos por ahi bobreque


PANCHO

Anónimo dijo...

ké bakán ... siempre (desde que existen) he querido tener un personal blog!, pero no me he dado ni el tiempo ni el ánimo necesario .... lo peor es que todo eso le echo la culpa a mi Diego!, no, pero los que han vivido la experiencia... hay un mundo de diferencia entre quienes ya hemos procreado vida humana...sangre nueva para este mundo... los que ya estamos criando a los futuros ciudadanos de Chile.

Pero felicitaciones por esta ventana virtual, por este re-nacimiento en versión digital.

Rodrigo 5.0?, podría ser no?, pero bien amigo y lo del viejazo... eso nos pasa a todos lo importante es poder reinventarse de cuando en cuando y reciclarse de cuando en vez!


aunque reniego de los clichès aki va uno... lo importante es lo que se siente de adentro... la edad que vale es la del alma, y por lo demás ... más sabe el diablo por viejo que por diablo!!

Un abrazo,

Lili

Anónimo dijo...

Rodrigo... Amigo... compañero... ¿Está seguro de que exponer su existencia así como así es una buena idea?????
¿Se fijó en comentarios como "ahora podré saber de tu vida" o "enterarme de tus últimos sucesos"?
Si alguien asume que anunciar tu calvicie es un "último suceso", invítalo a tomarse un café, porque no se ven hace muuuuucho tiempo.
Un abrazo.

Daniel Carrillo M. dijo...

Gracias por aquello de "papanatas de turno", pero debes saber que uno busca en lo demás los defectos -¿es la calvicie un defecto o un signo de la evolución de la especie, sobre todo en lo que a machos se refiere?-, los defectos, digo, que uno mismo tiene. Y es cierto, estamos envejeciendo y lo peor es que la cabeza pensante nos lleva la delantera por un buen par de años...

Robreche dijo...

¿Por "cabeza pensante" te refieres a lo que imagino? Jajaja. No esperaba menos de tu agudo sentido del humor, Discópata (no revelaré tu identidad, sólo diré que la primera inicial de tu nick coincide con la primera de tu nombre. Los demás sabrán identificarte por los datos que tú mismo diste: papanatas, proyecto de calvo y -agrego una pista- ...porque trabajas en el Diario Austral -¡ups! lo siento!!).

Amigo Herman: lo de mi calvicie no es novedad, es cierto, y desde el lunes, lo prometo, volveré a mi ostracismo y no revelaré más detalles de mi vida y me concetraré en hablar sobre periodismo, porque ya me cansé de que me hueveen porque me estoy quedando pelado. Firma: "Pela'o" Obreque

Lili: un abrazo, amiga, y no te desesperes por no poder crear tu blog todavía... Dieguito crecerá y en un par de años él mismo te hará uno, porque ahora los niños nacen pegados al computador, tal como nuestra generación tuvo en su coche una pelota de trapo (los hombres) o una pepona (las mujeres). ¡Uy, qué bien que lo pasábamos!

Panchito "Damphir": usted sí que sabe de calvicie, pese a su corta edad. Son las consecuencias de haber vivido con Luchito Patito y con Víctor Toledo. Un abrazo.

José Luis: A Parra le envidio dos cosas, la frescura de su pensamiento y su cabellera; a don Celindo, lo envidio por el buen humor y lo compadezco por su compañera de baile, ¿habrá sobrevivido al "koalazo"? Lo sabremos en el Austral de mañana, probablemente.
Vi tu blog y hay un par de detalles "tecnológicos" en los te que pediré orientación. Estamos en contacto.

Daniel Carrillo M. dijo...

Como buen periodista, "me mal sacaste de contexto", jejeje.
La "cabeza pensante" no es más que la cabeza poh, es de donde se cae el pelo. Lleva la delantera porque en mi caso -y quizás en el tuyo- es la primera señal del paso del tiempo. Ah...y sobre Don Celino, por lo que he leído, no es más que un viejo "koliado", o sea, perdón, "koaleado".
Saludos
PD: no miren mi blog, porque hace rato no lo actualizo.

Unknown dijo...

Estimado amigo:
Agradable sorpresa lo de tu blog, el inicio nada que decir, bastante reflexivo y tristemente realista jajajajajaajaja.
Solo espero que tu blog siga así y no continue como tu descendente carrera de arquero de futsal.

Ahora se puede entender porque la gente se va del estadio.......... arto malo el partido

Bic desangrado dijo...

... y claro: falta de pelo en la cabeza, la espera a que nos crezcan pelos en las orejas; la panza que se abalanza y el maldito frío invernal.

Afortunadamente, puedo decir que tengo 24 años y sufro de todo junto: la calvicie, la gordura, el exceso de completos, el fumar más de la cuenta, las arrugas y no ser capaz de llegar a 11 de las 10 pelotas que me envían a una esquina en la pichanga semanal.

Afortunadamente, la movida está en como dijo Florcita Motuda: ocupar menos años. Así es que yo ocupo 17.

Si a estas alturas no hay cómo no sentirse viejo. Osea, salí del colegio hace "apenas" 7 años y veo cómo los cabros de tercero medio hacen las delicias de sus tardes con Yamna y Maura, se convierten en chicos Emo-Core y salen a perrear por las noches. Osea... tal así como antes o eras Kurt Cobain o un huevón light que escuchabas Pearl Jam, en mi época eras aggrometal o no nomás.

Pero bueno,la "vejez" gana un gran espacio. Mientras otros llenan fotologs, nosotros hacemos exhibicionismo con las letras.

Saludos y que siga este ritmo de posteos.

Anónimo dijo...

Pjfsdi Eskdmlksej Sasneiwj Asnfkjr Nljifire Imnfsd Tdnsjf Onfksj
Tmkld Elkfjdr Amoidwjdoi Mdsf Omdseak!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Amigo obreak, ex dobleque o simplemente -como Sinatra es "La voz"- usted es "El puntual". Bien por tu blog. Me uno a quien se quejó por no haber tenido las agallas de abrir una cuenta de blog antes. Yo ídem. Y no creo que lo haga, en todo caso. Es que tengo mucha pega (yiaaaa). En cuanto a la edad, quiero decir que tb soy una versión 32.0 (de paso corrijo a un posteador que te catalogó como 5.0). Aunque esta cifra podría representar perfectramente los, por lo menos, 5 minutos tarde que llegas a todas las pichangas). En fin. La severa alopecia que te aqueja es una wevada no más weón, lo importante es que no se te caigan otras cosas. Como las ideas o la esperanza. A ESO ME REFERIA, por siaca.
A todo no sería malo hacer un comentario de comentarios. Daría pa harto.
Saludos a los posteadores y propongo dejar de lado la azotea de Rodrigo y hablar temas más trascendentes como la terrible e impactante ruptura entre "Celia punk" y "La rancherita". Atroz!!

Anónimo dijo...

Eres un tipo de la época. Ni muy atrás ni muy adelante. Te preocupa una imagen que usufructuó de la ganancia.¿Te duele envejecer? Vamos, muchacho, el mundo está a tus pies, claro que eso te obliga a tener la certeza bajo tus pies